Menos paredes y mucho más blanco hicieron de un viejo ático este flamante dos ambientes. Simpleza, estética y funcionalidad en las alturas de Barcelona. La reforma incorporó elementos de inspiración industrial que ayudaron a integrar estéticamente los elementos de la cocina.
Según cuenta Marta en el reportaje: “Nos encontramos con un piso muy pequeño dividido en tres ambientes minúsculos. Pensando en sus nuevos dueños, una pareja joven, tiramos paredes para crear espacios modernos y abiertos”
El reportaje es de Solange Van Dorssen y las fotografias de Gentileza Geor gina Dell’Isola